En una noche inolvidable para la Academia, Racing se quedó con un triunfo agónico frente a Newell’s Old Boys por 1 a 0, en el estadio Marcelo Bielsa, y selló su clasificación a los octavos de final del Torneo Clausura
El autor del gol decisivo fue Tomás Conechny, que definió con precisión en el tiempo de descuento, cuando el partido ya parecía condenado al empate. Desde el arranque, el partido no ofreció grandes emociones. El primer tiempo fue repartido, con pocas llegadas claras para ambos equipos. Newell’s buscaba lastimar con transiciones, mientras que Racing intentaba hacerse de la pelota, pero le costaba generar peligro en campo rival.
En ese contexto, el arquero de la Academia, Facundo Cambeses, tuvo al menos una intervención clave: le negó el gol a Newell’s con una gran atajada, lo que mantuvo vivo el plan académico. Por su parte, la defensa de Racing se mostró sólida, cuidando los espacios y evitando que la Lepra encontrara profundidad.
Con el correr del segundo tiempo, el partido empezó a acelerarse. Hubo momentos de ida y vuelta, con intención de ambos lados, pero la definición seguía siendo el gran problema de Racing. Parecía que el empate sin goles era el destino más probable, más aún porque Newell’s había asegurado su permanencia y no jugaba con la presión máxima.
Pero en los instantes finales todo cambió. A los 46 del segundo tiempo, Adrián “Toto” Fernández recuperó una pelota alta y lanzó un pase filtrado que dejó solo a Conechny por la banda izquierda. El delantero encaró con velocidad a la defensa rival, ajustó su remate y definió con frialdad ante la salida del arquero. ¡Gol y éxtasis académico!
El festejo fue intenso: los jugadores de Racing explotaron de alegría, sabiendo que ese tanto no solo les daba la victoria, sino también un lugar en la próxima fase del torneo. Además, gracias a ese triunfo, La Academia tendrá la ventaja de definir sus partidos de Playoffs en condición de local, algo fundamental para sus aspiraciones.
En cuanto a Newell’s, el desenlace fue doloroso. Cerró un año complicado, en el que peleó hasta casi el final por su permanencia, y despidió la temporada con una derrota en su casa. La Lepra mostró orden y algunas ideas, pero no logró evitar el golpe final ni responder en los momentos decisivos.
Para Racing, este triunfo es más que tres puntos: es una demostración de carácter y ambición. Con Costas al frente, el equipo parece estar encontrando esa mezcla justa entre solidez defensiva y eficacia en los momentos clave. Ahora, con la clasificación asegurada, la Academia mira con optimismo lo que viene: los Playoffs y la posibilidad de pelear por el título.
Foto: Prensa Racing Club.
Informa: Juan Donadio Paz.