Diego Pajares González
Los ultras del Olympique de Marsella apedrearon y lanzaron objetos el autobús del Lyon. Uno de los impactos acabó con Fabio Grosso, entrenador del Lyon, herido. El partido tuvo que suspenderse y acabó con 9 detenidos
Una de las imágenes del fin de semana ha sido la de Fabio Grosso lleno de sangre. Los ultras del Marsella atacaron el bus de su rival y, también, otros tres autocares de aficionados del Lyon. La investigación sigue abierta y se espera que las próximas horas se produzcan más detenciones.
Gérald Darmanin, ministro francés de Interior, ha confirmado que el proceso sigue abierto y que no hubo ninguna negligencia por parte de la seguridad. Ha defendido que se siguió el protocolo y el dispositivo era el adecuado para un partido de riesgo. Afirma que hubo 500 policías, de los cuales 9 resultaron heridos. El ministro, culpa a los aficionados y a los clubes de lo ocurrido.
Los hechos sucedieron antes del encuentro, en el desplazamiento del autobús del equipo visitante al estadio Velódrome. En su llegada, ultras del Marsella, aprovecharon para lanzar piedras y objetos, como latas de cerveza, al vehículo que transportaba a los futbolistas del Olympique de Lyon. En uno de eso lanzamientos, un objeto impactó con la luna y acabó con Fabio Grosso herido.
Un escándalo que vuelve a dejar en evidencia a Francia. El problema con los ultras viene de lejos y los aficionados más radicales del Marsella han sido varias veces protagonistas. Queda por ver cómo queda el asunto, cuándo se juega el partido y cuáles son las sanciones a los clubes. La ministra de Deportes, Amélie Oudéa-Castera, ha llamado la atención a ambos clubes y ha pedido que colaboren en las posibles sanciones.
Foto: RTVE
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