El conjunto madrileño se corona en WiZink Center en un partido que se definió por un solo punto en los últimos minutos
El Estudiantes Movistar y el Coviran Granada brindaron un verdadero espectáculo digno de una final de Copa Princesa que terminó con el equipo de la capital levantando la copa ante su afición que se dio cita en el WiZink Center el pasado domingo al mediodía.
Un Estudiantes muy superior
El conjunto de Pablo Pin comenzó el cotejo con una presión muy alta y con un despliegue defensivo formidable, pero los locales de a poco se fueron acomodando en la duela del WiZink Center. El primero en alebrestar la grada fue Larsen con un mate que levantó a la afición local.
Johny Dee castigó con una falta triple, el Coviran comenzó dormido y eso fue aprovechado por el equipo local. Pablo Pin no tardó en reunir a sus discípulos en un tiempo muerto apenas a los 4 minutos de partido con la intención de recuperar sensaciones positivas en el conjunto nazarí, Ellison descontó por parte de los visitantes, pero Larsen, Urtasun y Nacho Martín se encargaron de poner tierra de por medio en el marcador con tres triples consecutivos a dos minutos de finalizar el primer cuarto.
Edu Gattel volvió a descontar con dos anotaciones seguidas, pero Felipe Dos Anjos alargó de nueva cuenta la ventaja, Ramón Vila acercó a los granadinos, pero el Estu, aprovechando su buena dinámica y contundencia, amplió el marcador a 13 puntos.
Beirán una máquina de triples
El segundo cuarto mantuvo la misma tónica que la primera, pero con un Coviran Granada más motivado, y más cuando David Iriarte anotó un triple que acercaba al cuadro nazarí en el marcador. Con la ventaja de 10 puntos, el Estu comenzó a soltarse en la duela del WiZink Center, los rebotes favorecían al equipo de Cuspinera.
Los desaciertos aparecieron en el partido, los dos equipos entraron en un bucle sin anotaciones, hasta que Bropleh tomó la pelota y la incrustó en la red del aro para acercar al Coviran Granada en el marcador. Johny Deee respondió para bajarle los ánimos a un conjunto granadino que se metía poco a poco en el partido, Lluis Costa animó a los suyos con una falta bien cobrada, pero de nueva cuenta la reacción quedó ahí debido a lo triples de Beirán y Dee que adelantaron al Movistar Estudiantes a 15 puntos de ventaja. Beirán selló la magnífica primera mitad de los locales con una anotación de medio cancha sobre la bocina.
La revolución del Coviran Granada
El tercer cuarto mostró una mejor cara del Coviran que de la mano de Costa y Niamg, se acercaron en el marcador, sin embargo, Larsen y Fagguano respondieron para el Estu de manera inmediata. Los hombres de Pablo Pin dieron un paso al frente, Germán Martínez lo intentaba de tres, pero fue Lluis Costa quien levantó a los aficionados granadinos que se dieron cita al WiZink Center con un gran triple.
El parcial de 4-11 adormiló a los Estudiantes que veían cómo su ventaja se acortaba cada vez más, el Coviran comenzó la reacción y llegó a colocarse a 7 puntos de ventaja. Christian Díaz aprovechó el momento anímico para ponerse a 2 de ventaja a falta de dos minutos y medio. Costa le dio la vuelta al marcador en solamente un cuarto, pero de nueva cuenta apareció la estrella de Dee para recuperar la ventaja para los locales. Felipe Dos Anjos amplió la ventaja y Lluis Costa volvió a acercar a los granadinos. El partido se volvió un ida y vuelta.
Un Coviran valiente y un Estudiantes con corazón
Llegó el último cuarto y con ello la remontada que ya se vaticinaba desde el inicio de la segunda parte. Pere Tomás capitalizó un error en la salida de Varela, cogió la pelota y completamente solo recuperó la ventaja para los granadinos. El mismo Varela lavó su error para volver a poner a su equipo al frente con un triple, pero Christian Díaz ahogó la felicidad de los madrileños con otro tiple, que devolvió Beirán tan solo unos segundos después.
David Iriarte recibió un codazo de Beirán pero el mallorquín solo pudo anotar un tiro libre de los dos de castigo. Sin embargo, Bropleh se encargó de regresarle la ventaja al Coviran, inmediatamente Beirán volvió a aparecer, pero Bropleh respondió con una dosis triple que derivó en la algarabía de los suyos. Larsen no quiso quedarse fuera de la fiesta y con una gran jugada individual empató el marcador. El mismo Larsen pondría de nueva cuenta en ventaja a los madrileños unos segundos después.
Urtasun amplió la renta a 4 puntos y Pablo Pin reunió a sus hombres para planear la estrategia de los últimos minutos. Larsen volvió a encontrar aro y subió a 6 la ventaja para el Estu, Niang hizo reaccionar al Coviran a falta de dos minutos. El mismo Niang realizó una falta que le dio la oportunidad a Urtasun de anotar dos puntos de tiro libre.
Un cierre de película
El árbitro castigó a Christian Díaz por una supuesta falta en media cancha, situación que hizo enfadar a los nazaríes. A falta de minuto y medio, el mismo Díaz volvió a acercar a los suyos a tres. Pablo Pin metió a Bropleh, y Niang puso a uno la diferencia.
El partido estaba para cualquiera, Como de película, Costa tenía la victoria, pero decidió servir para Pere Tomás, que falló su triple ante los ojos espectadores de los aficionados madrileños, que veían más cerca el título. Con 10 segundos por jugarse, a los granadinos les quedaba una carta por jugar, Pablo Pin armó su último ataque, Costa consiguió lo que quería, una falta de tres tiros, el catalán se situó en la zona de tiros libres, anotó el primero, metió el segundo, pero erró el tercero, el del empate.
Los Estudiantes lo tenían en la bolsa, Pere Tomás cometió su quinta falta, Valera lo tenía en sus manos, el joven falló los dos tiros libres, Bropleh cogió la pelota, intentó el triple sobre la bocina, pero esta vez no encontró aro. El Estudiantes Movistar se alzó con la victoria en un partido que el Coviran Granada bien pudo merecerlo gracias a su gran reacción en la segunda parte.
La próxima semana los dos equipos se volverán a ver las caras en el mismo escenario, pero con la mente en un nuevo objetivo, el ascenso a ACB.
Foto: Fermín Rodríguez, Fundación CB Granada
Informa: @rodro201089