El conjunto nazarí lidera la clasificación de la categoría de plata del baloncesto nacional. El próximo domingo el Coviran Granada jugará por primera vez la Copa Princesa ante Estudiantes Movistar


En el año del 2012 nadie imaginaba que en Granada volvería a haber baloncesto profesional. Después de la desaparición del CB Granada, los aficionados nazaríes se resignaban a perder una de las plazas, que durante muchos años se mantuvo en la máxima categoría del básquet español. Fue entonces, cuando de la mano de Óscar Fernández-Arenas, nació la Fundación CB Granada, el granadino cogió al equipo en la primera categoría (Primera Nacional). 

Hoy, a punto de cumplir su décimo aniversario, el Coviran Granada ha ascendido hasta la categoría de plata del baloncesto nacional (LEB Oro),  La historia de la Fundación CB Granada es loable, y no solo por los grandes éxitos que se han alcanzado en estos 10 años, si no también por las acciones sociales, que, como su propio nombre lo indica, son dignos de una fundación. 

El conjunto nazarí lleva tres temporadas en la LEB Oro, y desde entonces, siempre ha sido protagonista peleando por los primeros lugares de la clasificación. Una parte fundamental del éxito del equipo, es sin duda alguna su jefe de orquesta, su entrenador Pablo Pin, qué ha estado con el equipo desde su creación. Pin se ha ganado el cariño y la admiración de toda la afición granadina ya que año tras año, ha demostrado estar capacitado para llevar el timón de un equipo que está a las puertas del ascenso a la ACB.

Una segunda oportunidad

El año pasado fue la consolidación del Coviran Granada en la LEB Oro, el conjunto rojinegro terminó como líder de la clasificación, pero debido al formato impuesto por la situación de la pandemia, el equipo no pudo acceder automáticamente a la ACB.

Durante el play-off de ascenso tuvieron grandes actuaciones derrotando a Murcia y a Coruña en cuartos y semifinales respectivamente. En la final se toparon con el Breogán, la serie tuvo que llegar a su quinto partido, y parecía que todo estaba puesto para que el Granada consiguiese ese premio, que por derecho merecía. Sin embargo, el cansancio de toda la temporada exitosa hizo mella en los jugadores, los granadinos terminaron por perder de 30 puntos en el Palacio de Deportes y el ascenso no llegó ante la tristeza de todos los aficionados. 

Ese mismo día, el fénix renació, al igual que en su escudo, de las cenizas se volvió a alzar un equipo que se había llevado un palo enorme, pero que no dejaría de luchar por el sueño del ascenso. Dicho y hecho, la temporada del Coviran Granada ha sido de ensueño, los números del equipo son formidables.

Una temporada de ensueño del Coviran Granada

Pablo Pin mantiene puntero a un equipo que ha demostrado estar preparado para competir en la máxima categoría. La próxima semana llega la etapa vital para los rojinegros, el domingo jugarán por primera vez en su historia la Copa Princesa ante un histórico del baloncesto español, el Movistar Estudiantes. Una semana después, ante el mismo rival, se jugarán una auténtica final por el ascenso a la ACB. En un lapso de 7 días, el WiZink Center será el escenario de dos partidazos, encuentros que podrían decantar la balanza para uno u otro en sus aspiraciones de alcanzar la élite del baloncesto español.

Pase lo que pase, la historia de la Fundación CB Granada seguirá siendo loable. Granada quiere ACB, Granada merece ACB. Culminar esta gran historia en una década es un sueño para toda la afición granadina y la entidad, lo que es un hecho es que, este equipo no tiene techo, y las estrellas están más cerca de lo que parece. 

Foto: Fermín Rodríguez, Fundación CB Granada

Informa: @rodro201089