Diego Farell
Como cada cuatro años, los directivos de la Federación Mexicana de Futbol (FMF) no mantienen un proyecto estable de cara a más de cuatro años y técnicos exitosos han pasado una de las sillas con mayor presión en nuestro balompié, incluyendo la del Club América en cuestión a nivel de clubes.
Hay un problema en el «Tricolor» y esto se refleja en la cantidad de entrenadores que han pasado en los últimos años, pues pese a que se busque un proyecto estable, solo dos se mantuvieron durante todo el proceso mundialista y son: Ricardo Antonio La Volpe de cara a Alemania 2006 y Juan Carlos Osorio a Rusia 2018.
¿Cuál es el problema que persiste en la Selección Mexicana?
Cuando tienes un error y no corriges en la búsqueda de trascender a otra tarea, los objetivos a largo plazo no se van a cumplir por no prestarle atención. Tal y como pasa en la FMF al querer «tapar el sol con un dedo» en un proceso mundialista, ya que antes de pensar en arreglar el desastre en el combinado azteca, lo primero que se debe de hacer es corregir detalles en la liga local con el tema del ascenso y descenso y formato de competencia.
Posteriormente, no cortar al técnico del representativo mayor y dejar que él, junto con su cuerpo técnico, trabajen de cara a conseguir resultados y campeonatos.
En pocas palabras, dejemos los discursos a un lado, pues estos son problemas que vienen de años atrás y no se ha logrado solventar de cara al bien deportivo y no sólo lo comercial, trayendo consecuencias al quedar fuera de fase de grupos de Qatar 2022, caer ante el histórico rival por campeonato de la Concacaf y sufrir ante rivales que antes se dominaban dentro y fuera de la cancha.
Aunado a esto, la problemática principal del cuadro mayor no sólo recae en los entrenadores, si no en los jugadores que no se exigen de más en el torneo local y el que va Europa al querer llega de golpe a equipos de mayor jerarquía en las mejores ligas del mundo, sin darse cuenta del trabajo a realizar para conseguir trascender a una institución de renombre en el viejo continente.
Finalmente, la venta de futbolistas tiene que cambiar, mandando al que tenga mayor calidad y ganas de trascender desde abajo tanto en los entrenamientos como en los partidos.
¿Ustedes que piensan? ¿Qué otros cambios debe de haber en el fútbol nacional?
