Alex Gómez
Los azulgrana han dominado a los malagueños desde el inicio apoyados en su gran defensa y su dominio del rebote (75-87). El Real Madrid será el rival en la final de la Liga Endesa
El Barça será el rival del Real Madrid en la final de la Liga Endesa, al mejor de cinco partidos, tras eliminar este martes al Unicaja en semifinales por un global de 3-1 gracias a su nuevo triunfo a domicilio en el Pabellón Martín Carpena de Málaga por 75-87.
El inicio del Barça fue excelente, con una defensa casi perfecta del perímetro y con un gran porcentaje de acierto con 4/7 en triples. Los cambios defensivos fueron notables e impidieron a los locales encontrar posiciones claras de tiro, lo que hizo que la renta visitante fuese en aumento sin solución de continuidad.
Satoransky dio la réplica a dos triples de David Kravish y los excelentes minutos de James Nnaji con +9 de valoración en menos de cuatro minutos fueron clave para que los visitantes empezasen a escaparse en el marcador (10-16, min. 4:55 tras un dos más uno del nigeriano).
La defensa azulgrana solo permitió anotar cinco canastas en juego a los vigentes campeones de la Copa del Rey y la puntería en el triple con 4/7 en el primer cuarto hizo el resto para permitir al Barça completar los primeros 10 minutos con una cómoda ventaja después de mostrarse muy superiores (13-23).
Varias pérdidas del Barça propiciaron un arreón verde en el arranque del segundo cuarto (21-25). Pero el Barça no titubeaba. Jasikevicius mantuvo su rotación permanente y los azulgranas no perdieron intensidad. Nnaji, siete puntos al descanso, volvió a hacer bastante daño en la pintura y Mirotic acumulaba buenos minutos. Enfrente, Perry no le cogía la temperatura al partido y se marchaba al banco resignado con un 0/6 en tiros (37-45 al descanso).
El segundo tiempo fue un paseo para el Barça. El Unicaja amagó tímidamente con una remontada. Un pequeño parcial de 5-0 protagonizado por Perry fue sofocado sin problemas por el equipo visitante. Los ataques cajistas se ahogaban en la extraordinaria defensa rival mientras que el Barcelona con Kuric, Mirotic y Abrines seguía ampliando la renta (52-73).
Un parcial de 4-22 fue el golpe mortal para el Unicaja, que ya no pudo levantarse. Antes del desenlace pasó de todo, expulsión de Jasikevicius incluida. Los malagueños ya no pudieron reaccionar y tan sólo maquillaron el marcador final. Cierran una temporada notable en la que el Carpena ha vuelto a ilusionarse, pero el Barcelona fue demasiado en esta serie. Por eso jugará la final, que empezará el próximo 16 de junio en el Palau Blaugrana, donde también se disputaría el quinto partido en caso de ser necesario al contar el equipo catalán con factor cancha a favor después de haber quedado líder en la fase regular.
Fotos: ACB y Sport
Twitter: @alexgomezse
