La Selección Mexicana empezó con tres puntos su camino rumbo a la clasificación al Mundial de Qatar, venciendo con mucho sufrimiento a Jamaica por marcador de 2-1, bajo una incesante lluvia en el Estadio Azteca
En el marco del arranque del Octagonal Final de la CONCACAF y con muchas ausencias del lado mexicano, pero sobre todo del conjunto caribeño, el Tri tuvo su primer partido de la eliminatoria en casa, buscando corregir el rumbo tras los descalabros en Nations League y Copa Oro y no fue para nada un partido fácil.
Un Estadio Azteca sin gente y un clima adverso fueron testigos de un encuentro muy trabado, con muchas imprecisiones en medio campo y con un equipo mexicano que fue de más a menos en el primer tiempo. El Tri tuvo apenas dos ocasiones, la primera mediante un remate de cabeza de Funes Mori que increíblemente no entró y un remate cruzado de Córdoba que se fue desviado.
México se vio sin mucha idea, con pocas variantes dentro del campo y muchas veces hasta desesperado, permitiendo que su rival creciera de a poco y tomara más confianza de cara al arco rival, Jamaica empezó a equilibrar el partido a través del físico de sus futbolistas y el conjunto mexicano se estrellaba una y otra vez ante una defensa bien parada.
El segundo tiempo comenzó con una mejor cara de la selección azteca, fueron 15 minutos de una intensidad mucho mayor, con el balón moviéndose más rápido, a uno o dos toques, y aprovechando las bandas para generar superioridad. Alexis Vega abrió el marcador en una buena jugada por izquierda, el futbolista de Chivas enganchó hacia el centro y venció al arquero con un disparo potente a primer palo, parecía que todo mejoraba.
Incluso se tuvo una ocasión para ampliar el marcador, Funes Mori recibió dentro del área, recortó a su defensa y sirvió para un Piojo Alvarado que entraba sólo al segundo poste, ante el arquero vencido, Roberto impactó de zurda directamente al metal, perdiéndose una jugada increíble. Apenas un minuto después, Jamaica empataría tras un pésimo rechace de Jorge Sánchez y una gran volea de Nicholson que venció a Ochoa, se venía la noche.
Con poco menos de media hora por delante, México se metía en serios problemas, parecía que el partido quedaría empatado, pues no se veía por dónde el Tri pudiera generar mayor peligro. Los cambios llegaron, la entrada de Orbelín Pineda revolucionó al equipo, le dio otra dinámica y mayor variedad en ataque, pero el que marcó la diferencia fue el delantero del América, Henry Martín.
Apenas recién ingresado, el 9 de la selección olímpica aprovechó un rebote y prendió un derechazo que se coló por la escuadra, le regresó el alma al cuerpo a Martino y a miles de mexicanos, el Tri resolvió sobre la hora, con mucho dramas y lleno de dudas, se sacaron tres puntos muy valiosos en la eliminatoria.
En general, fue un partido regular de México, que sigue sin tener variantes tácticas, con un 4-3-3 muy rígido y sin respuesta muchas veces desde el banquillo, dejándolo todo a la inspiración individual y con una posesión muy en horizontal que muchas veces resulta estéril, teniendo muy pocas opciones al frente. Hay mucho por corregir y poco tiempo, faltaron varios futbolistas en esta convocatoria, pero México puede y debe jugar mejor en los siguientes partidos.
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