Emi Huertas
Tras un enero con un calendario muy duro, el Real Madrid cierra el mes con sabor agridulce, yendo de menos a más
Enero siempre es un mes de empezar. Nuevas metas, nuevos objetivos. Retomar las promesas que nos hicimos en el año anterior. Soñar con un año que estará lleno de cosas buenas, y luchar por ello. En definitiva, de empezar -y cumplir- nuevos propósitos. Para todos. Bueno, para todos excepto para el Real Madrid, que tiene que seguir rindiendo honores a su historia. O lo que es lo mismo, que tiene que seguir peleando por ser campeón de todo. Los blancos nunca empiezan porque nunca acabaron de ganar. No lo necesitan.
Y así empezaba enero en la Casa Blanca. Una única meta, propósito u objetivo: GANAR. Seguir ganando. Algo que es fácil de decir, pero que muy pocos pueden hacer.
El calendario no le pondría fácil dicho propósito al Real Madrid. Los de Carlo Ancelotti empezaban con una eliminatoria de Copa del Rey -de esas que se les suele atorar desde hace algún tiempo-; después, partidos difíciles de LaLiga contra rivales de la parte alta de la tabla; y, entre medias, la cuestionada Supercopa de España en Arabia Saudita.
Bien, pues aunque para cualquier ‘mortal’ el balance de este mes de enero sería positivo, para el Real Madrid ha dejado dudas. Luces y sombras. Sabor agridulce. Llamémoslo como queramos, pero enero ha supuesto todo un desafío para el Real Madrid.
El Real Madrid compaginó buenas y malas actuaciones
En LaLiga, se dejó puntos en su visita a Villarreal y el pasado fin de semana vs Real Sociedad. Contra el Athletic Club sí cumplió, en un escenario muy difícil, por cierto. Pese a que estos rivales son auténticos equipazos y se presumen encuentros en los que te puedes dejar puntos, para el Real Madrid este balance es claramente negativo.
En la Copa sí cumplió, y con creces. Tras eliminar al Cacereño, se vio las caras contra el Villarreal y Atlético de Madrid en las eliminatorias venideras. En ambos partidos salió reforzado, tanto por la heroica remontada como por la notoria entidad de los rivales.
Fue en la Supercopa de España donde, claramente, el Real Madrid fracasó. Y podemos decir que estrepitosamente. Tras eliminar a un buen Valencia CF después de la lotería de los penaltis, llegó la final vs FC Barcelona. El Clásico, como ya sabéis, no tuvo mucha historia. Los de Xavi pasaron por encima de un pobre Real Madrid, sembrando dudas sobre el estado del equipo y quedando varios jugadores señalados.
Tras esta debacle, el Real Madrid -una vez más- se sobrepuso y consiguió maquillar un mes de enero para olvidar. Muchas sombras y pocas luces. Hablando en clave Real Madrid, claro. Porque para cualquier otro equipo hubiera sido un mes notable.
Las notas positivas las han dejado jugadores como Ceballos o Camavinga, quienes han dado un claro paso al frente y están para disputarle el puesto a los llamados intocables. Mención especial también para las remontadas de Copa del Rey vs Villarreal y Atlético de Madrid. Acto heroico que parece no pasar de moda para el equipo blanco.
Al Real Madrid le toca afrontar otro mes duro, con la Champions League a la vuelta de la esquina y la autopromesa de tener que competir hasta el final en Copa del Rey y en LaLiga. Así lo dicta su historia. Porque como suena cada tarde de fútbol en Concha Espina: “Hasta el final, Vamos Real”.
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