Alex Gómez
Los azulgranas consiguen pasar a octavos después de un partido sufrido ante el Intercity que se ha decidido en la prórroga (3-4). Hasta tres veces llegaron a empatar el encuentro los alicantinos
La Copa del Rey tiene estas cosas y por eso es tan especial. Un equipo de Primera Federación como el Intercity fundado en 2017 cayó en la prórroga ante todo un Barcelona con gran parte de sus titulares. Los de Siviero se lo creyeron en la segunda parte y tutearon a los de Xavi con un desparpajo impropio de su categoría. No es que le tutearan, es que le marcaron tres goles y todos con el mismo protagonista: Soldevila. El canterano culé y socio azulgrana en la actualidad jugó el partido de su vida. Marcó tres goles y pudo hacer un cuarto que evitó Iñaki Peña en la única parada que hizo en todo el partido. Pero en la prórroga Ansu Fati decidió y evitó que la sorpresa fuera descomunal.
Xavi optó por dar minutos a algunos futbolistas que los necesitaban como Iñaki Peña, Bellerín, Memphis, Kessie y Pablo Torre, pero también a un buen número de titulares, contando el Barça con hasta siete mundialistas en su once. A todos ellos, les ha pedido que salieran metidos en el partido. Y así lo han hecho.
Se habían disputado solo trece minutos y el Barça ya había rematado hasta cuatro veces a la portería de Gaizka. La primera de ellas estuvo cerca de convertirla en gol Pablo Torre. La segunda, significó el primer gol del partido. Araujo volvió a jugar tras su larga lesión y el uruguayo marcó de cabeza a la salida de un córner entrando como un avión desde atrás. Además, sacó un balón sobre la línea de gol que evitó el empate de Aarón Piñán en la primera llegada de los alicantinos.
El Barcelona estaba haciendo los deberes, pero le faltaba uno: asegurar el resultado. Memphis y Ferran fueron quienes más se acercaron. El primero en una falta que dio en Álvaro y acabó tocando el larguero tras una extraña parábola y el segundo con un remate cruzado que también rozó Álvaro y se fue rozando el poste. Pablo Torre, otra de las novedades en el once, estuvo muy activo dejando claro que le sobra personalidad. Pero las intentonas catalanas se quedaban sin premio. Dembélé, con regates de más, y Ferran, con regates de menos, no encontraban la forma de hacer más daño al conjunto de Siviero. Y, con el partido aún abierto, pese a que el Intercity sólo tuvo la gran ocasión de Piñán, se llegó al descanso.
Arriesgó Siviero en la segunda parte dando entrada a un delantero centro, Cristian Herrera, por un central, Rafa Gálvez. Piñán, un incordio, confirmó el paso adelante del Intercity con dos internadas peligrosas, pero el equipo local también dejó más huecos atrás. Parecía cuestión de tiempo que el Barça los aprovechara, pero Dembélé remató solo al cuerpo del portero y Ferran se entretuvo en recortes. El 0-2 no llegaba y el Barça lo pagó. Córner mal defendido y remate en boca de gol de Soldevila tras toque por alto de Murria. 1-1 en el 59′. Lamentable.
Xavi movió el banquillo y sentó a Ferran, Pablo Torre y Araujo para dar entrada a Raphinha, Gavi y Eric. Salió bien muy pronto. Gran pase entre líneas de Gavi y vaselina de crack de Dembélé sobre la salida de Gaizka Campos. Pero este Barça no es fiable y el 1-2 duró muy poco. Otra vez Soldevila en boca de gol fue el más listo tras centro de Cristo para lograr el 2-2 en el 74′.
El partido se había vuelto loco y así iba a seguir hasta el final, con un tercer gol de Raphinha y con el ‘hat-trick’ de Soldevila tras un fallo de Marcos Alonso que llevó el partido a la prórroga.
Ansu Fati fue el primero en rozar el gol en la prolongación, pero paró Campos con suspense. Luego Dembélé, jugando de ‘9’ con Fati en la izquierda y Raphinha en la derecha, cruzó demasiado sin ángulo en lugar de centrar. Y por fin llegó el 3-4 de Ansu en el 104′ con un remate potente que tocó en un defensa tras pase de Raphinha.
La cuarta fue la vencida para un Intercity que se quedó ya sin poder de reacción, pero debe estar orgullosísimo del partido realizado.
Fotos: Mundo Deportivo y El Confidencial
Twitter: @alexgomezse
