La emoción se apoderó del Giorgos Karaiskakis Stadium en Grecia, donde el Manchester City y el Sevilla protagonizaron una batalla épica en la Supercopa de Europa
El enfrentamiento comenzó con un dominio aparente por parte del equipo dirigido por Pep Guardiola. Sin embargo, el Sevilla demostró su determinación al no ceder ante el control del balón por parte del City.
En el minuto 25, el Sevilla dio el primer golpe en el marcador con un magnífico cabezazo de Youssef En-Nesyri, dejando a Ederson sin posibilidad de detener el disparo. A pesar de los esfuerzos del portero del Manchester City, el remate del delantero marroquí encontró el fondo de la red.
La tensión creció a medida que el partido avanzaba, y la igualdad en el marcador al término del tiempo reglamentario desencadenó una definición emocionante desde los once metros.
En la tanda de penales, los Cityzens lograron imponerse con un marcador de 5-4, consagrándose como los campeones de la Supercopa de Europa.