El Manchester United pone sus ojos en el ecuatoriano como pieza clave para su reconstrucción, soñando con repetir la historia de un tricolor que marque época en Old Trafford
Desde la tierra de la marimba, Pervis Estupiñán, oriundo de San Mateo, ha hecho del fútbol su idioma y del lateral izquierdo su trinchera. Hoy su nombre, está en la mira Europa y vuelve a colocarnos frente a una ilusión conocida: la posibilidad de ver a otro ecuatoriano vistiendo de rojo en la ciudad de Manchester. En un mercado donde pocos brillan con tanta luz propia, el Manchester United lo observa con deseo y planificación, como aquel que ya sueña con su próxima gran joya.
Aunque su nombre ya ha rondado oficinas como las del Napoli y el FC Barcelona; hoy la historia toma un giro más audaz: Chelsea, Liverpool y con más fuerza el Manchester United que lo tiene en la mira. Los mismos Red Devils que alguna vez vieron a un tal Antonio Valencia dejar una huella imborrable, podrían ahora abrirle las puertas a otro embajador de la tierra de los cuatro mundos.
Estupiñán, a sus 26 años, no es un improvisado. Con experiencia en la Premier League y en torneos europeos, sabe lo que es el rigor del fútbol de élite. Su valor de mercado, está entre los 40 millones de euros, una cifra que no asusta a un United en plena reconstrucción, liderado por el estratega portugués Rúben Amorim. El técnico luso busca carrileros que vuelen, marquen, asistan y respiren intensidad en su sistema 3-4-3. Y ahí, Pervis encaja como anillo al dedo.
A pesar de haber atravesado una temporada marcada por lesiones, el lateral ecuatoriano, se encuentra concretado con la Tricolor y esta listo para esta doble jornada con la selección. Su motivación está por las nubes, decidido a recuperar ese nivel que lo llevó a ser considerado uno de los mejores en su posición, superando incluso a nombres como Alphonso Davies o Theo Hernández.
Su juego es una mezcla de potencia y poesía, va y viene como un relámpago por la banda, con el pulmón de un maratonista y la clase de un veterano «En defensa es firme, en ataque es puñal». Esa dualidad lo convierte en una pieza codiciada por el United, un gigante dormido que quiere despertar del letargo y volver a dominar Europa.
Pervis Estupiñán no es solo un futbolista. Es la promesa renovada de un país que ya supo ver a uno de los suyos levantar la voz en la Catedral del Fútbol. Hoy, el rojo de Manchester podría teñirse nuevamente de tricolor.