Desde Portoviejo con hambre de gloria, Miguel Parrales aterriza en el Ídolo del Ecuador con sed de revancha, goles y una historia por escribir
No todos los días son grises en el mundo de Barcelona SC. Ayer, en medio de rumores y susurros de pasillo, el club encendió la chispa de la ilusión. Una imagen en sus redes bastó para que la hinchada conecte las pistas: el tatuaje inconfundible de Miguel Parrales (una foto con su esposa e hijo grabada en la espalda), confirmó lo que ya era un secreto a voces. Y hoy, con sello oficial, el manaba es nuevo refuerzo del Ídolo para fortalecer el ataque en este segundo semestre.
Aunque el equipo cuenta con su goleador Octavio Rivero (6 goles esta temporada), hace falta alguien que lo acompañe arriba y esté presente en los momentos bravos. Y Parrales llega con hambre, con sed de revancha y con la idea de dejar su huella en el club más grande del país.
¿Quién es Miguel Parrales Vera?
Oriundo de la “Ciudad de los Reales Tamarindos”, Portoviejo, Miguel Parrales nació un 26 de diciembre de 1995. Delantero con calle, barrio y con recorrido, de esos que no se rinden y siempre andan cazando el gol. Hoy llega a calzarse una camiseta que pesa, pero que también levanta. Esa misma que vistieron otros manabitas ilustres como Claudio Alcívar y David Bravo, entre otros.
Se formó en las inferiores de Liga de Portoviejo y debutó en 2012 con Manta FC, bajo la guía de Armando Osma con 16 años. Su mejor versión apareció con Guayaquil City, cuando en 2023 se coronó goleador de la LigaPro con 16 tantos. Ese rendimiento lo llevó a Liga de Quito, aunque no encontró espacio con el técnico Alcácer. Fue a préstamo a Orense y allí volvió a encenderse: 16 goles en 28 partidos, gritando presente como en sus mejores días.
En total, Miguel Parrales ha anotado 109 goles con sus distintos clubes en torneos nacionales e internacionales, de los cuales 75 han sido en LigaPro. Ahora, está listo para vestirse de amarillo. Llega con experiencia, potencia y un contrato que bordea los 25 mil dólares mensuales; una cifra que refleja tanto el valor de sus goles como el deseo de Barcelona SC por volver a pelear arriba. Como parte del acuerdo, el club adquirió el 80% de sus derechos deportivos y firmó un contrato hasta junio del 2028. Con 29 años recién cumplidos, Parrales superó los chequeos médicos y este mismo día ya se integró a los entrenamientos del primer equipo en el Estadio Banco Pichincha.
Aunque Barcelona SC , aún debe resolver asuntos pendientes con la FIFA, pero ya inició gestiones para saldar deudas con exjugadores y así habilitar a Miguel Parrales, junto con otros posibles refuerzos. La medida que impide inscribir futbolistas sigue vigente, pero la directiva confía en revertirla pronto. De momento, Parrales es el único fichaje oficial, aunque se esperan más movimientos en el mercado del Ídolo.
Hoy Miguel Parrales busca su revancha en un grande. Llega al Ídolo del Ecuador con ganas de escribir historia y poner su firma en cada red. Porque si sus goles ya hicieron ruido en varios estadios, ahora quiere que el Monumental ruja con su nombre.