Nicolás Ballon
Historia pura se vivió esta tarde en el Santiago Bernabéu. Real Madrid remontó la llave al poderoso PSG en 17 minutos, en un partido consagratorio para Karim Benzema, quien confirma su lugar en los libros de historia del madridismo.
Me va a costar muchísimo poner en palabras lo que ocurrió el dia de hoy. El Real Madrid venció por 3-1 al PSG de las estrellas, quien contó con la delantera Messi-Mbappe-Neymar en el equipo titular. Remontó en su casa, un resultado que hasta el segundo tiempo era muy adverso. Una noche mágica para el equipo más grande de todos los tiempos.
El ambiente previo al partido fue realmente abrumador. Los fanáticos del Real Madrid realizaron un banderazo en las afueras y recibieron al equipo de una forma espectacular. No había una mejor manera de motivarse dentro de una eliminatoria tan complicada como esta.
El Real Madrid lanzó su equipo titular, con la excepción de Nacho (ingresó por Mendy) y Valverde (ingresó por un lesionado Casemiro). El PSG colocó a todas sus estrellas, incluyendo a la delantera estrella, con Mbappé a la cabeza.
Se esperaba desde ya un partido sumamente emocionante, pero muchos guionistas, ni los mejores creo, podrían haber escrito la historia como el merengue lo hizo hoy.
Primer Tiempo: un partido de pizarra.
Durante los primeros minutos el Real Madrid sale a presionar a los franceses con mucha intensidad y buscando avanzar los laterales y atacar por bandas, tanto con Vinicius y Carvajal. El PSG buscó luego imponerse trabando el juego del merengue y tocando en salida el balón, con un Verrati recuperando mucho, asociándose con un Messi que sirve como nexo junto con Neymar, y finalizando las jugadas con Kylian Mbappé.
Tras una serie de intervenciones de Courtois, el PSG finalmente obtendría la llave del cerrojo blanco. Un pase excepcional de Neymar encontraba a Mbappé, quien sacó provecho de su velocidad, encaró a Militao y definió a primer poste, anotando el primero para el conjunto francés.
El francés anotaba su primer gol en el Bernabéu, para muchos, su futura casa. Posterior al gol el PSG se afianzaría a su juego de posesión, adelantando lineas y destacando aún mas en tres cuartos de cancha. Los destacados? Verrati y Mbappé.
Hay que destacar el buen primer tiempo de los franceses. Verrati se devoró el mediocampo, siendo el nexo entre la defensa y Messi, el encargado de enviar balones hacia el único delantero. También hay que destacar la labor de Neymar, quien fue un medio de pase hacia los laterales, que subieron bastante a lo largo de los primeros 45.
El Real Madrid sufrió netamente la presencia de Kylian Mbappé, quien se perfilaba a ser la figura del encuentro, siendo muy desequilibrante en las jugadas verticales y de contragolpe. Si bien, el primer tiempo acababa 1-0 para los parisinos, el esquema táctico de Pochettino parecia funcionar, al menos, hasta ese momento.
Segundo Tiempo: 45 minutos para la Historia del Madridismo
A medida que entrábamos en el segundo tiempo, el PSG se afianzó en su juego de posesión y ganó varios metros de superioridad en la cancha merengue. Mbappé atentó nuevamente contra la portería del Real Madrid en dos ocasiones, siendo la segunda un gol espectacular, con el disfortunio de que estaba adelantado. Kylian era la pesadilla del conjunto español.
Si bien el equipo francés comandado por Mbappe seguía siendo dominante en el terreno, el Real Madrid en ningún momento desistió de su objetivo, ni bajo los brazos. Se encontraría pues, un regalo a su insistencia: Donnarumma le regalaba la pelota a Benzema, quien empujaba el balón y descontaba, dejando el marcador global 2-1.
El que venía siendo el mejor jugador del Madrid obtenía su recompensa como si esta cayese del cielo. El Santiago Bernabéu estallaba, el rey de Europa estaba despertando de a pocos. El conjunto blanco recibió un impulso de energía y ganas con este gol, y procederían a seguir intentando, llegando al arco incluso en múltiples ocasiones.
El partido se encontraba en su mejor momento, hasta que lo impensado ocurrió. Una pelota que recuperaba Luka Modric era recibida por Vinicius, quien perfiló por izquierda, encontrando nuevamente al croata, quien conectó con Benzema, que de un latigazo condenó al PSG y empataba todo. El Madrid empataba la serie en poco mas de 15 minutos, con doblete de su jugador estrella: Karim Benzema.
Apenas segundos después del estallido más grande que se ha escuchado en mucho tiempo en el Bernabéu, vendría lo que para muchos es la última pala de tierra que sepulta la tumba del PSG. Al intentar salir jugando, los franceses perderían un balón, que recibió Benzema, quien anotaba su tercer gol de la noche, remontando la serie y dejándola 3-2.
La locura se apoderaba del hincha merengue y de los millones de espectadores a lo largo del globo. Estábamos viendo historia. Karim Benzema escribía la página definitiva en su grandiosa carrera, y una nueva remontada en los libros del club más grande de la historia.
El partido culminó con un Real Madrid incansable, que siguió atacando ante la adversidad, y que demuestra nuevamente, que hay cosas que el dinero simplemente no puede comprar.
En la otra cara de la moneda, un fracaso rotundo. Un plantel plagado de estrellas, construído como si un videojuego se tratase, llenándose de jugadores que no encajaban dentro del planteamiento, y que sumó mas nombres por marketing que por fútbol. Pochettino es el mas señalado, junto con el argentino Messi, de esta catástrofe. Una debacle histórica para el que decían muchos, era un equipo destinado a la grandeza.
El Real Madrid nos demostró que la grandeza no se puede comprar, no se discute, y sacó a pura garra un resultado para la historia del fútbol. Tras esto, buscarán su Champions número 14. Imposible, definitivamente no lo es.
Fotos: PSG, Real Madrid
Twitter: @nicolasball00on
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