Derrota por la mínima de los azulgrana ante el Inter, que complica seriamente el camino hacia los octavos de final de la Champions. Mal partido del equipo de Xavi, al que además el VAR le birló un penalti en el último suspiro
El Barça perdió una oportunidad de oro para encaminar su clasificación a octavos de final de la Champions tras perder en Italia ante el Inter de Milán (1-0). Los de Xavi dominaron, pero el gol cayó del lado de un defensivo conjunto italiano en un partido que estuvo marcado por una nueva polémica con el VAR.
El Inter tenía claro cómo jugar al Barça. Dejarle el balón replegados atrás y con salidas rápidas a la contra siempre que se pudiera. Y así llegó el primer aviso italiano, que lo dio Çalhanoglu con un gran disparo desde lejos que desvió Ter Stegen a córner. Xavi sacó a sus mejores jugadores en el centro del campo y la delantera, pero en la defensa sigue haciendo cambios partido a partido. En San Siro jugaron Sergi Roberto, Christensen, Eric García y Marcos Alonso quedando fuera los capitanes Piqué y Jordi Alba. Pese a las bajas, su buen partido en Palma no fue suficiente.
Los primeros instantes del choque arrancaron según en plan diseñado por Xavi Hernández, con mucho dominio de los blaugranas en campo contrario ante un Inter que prefería esperar su oportunidad a la contra. Así, el primer cuarto de hora fue un monólogo del conjunto visitante, eso sí, con el primer aviso de los locales en el 7′, que terminaron una trastabillada contra con un disparo desde la frontal despejado por Ter Stegen.
El partido pudo cambiar a los 20 minutos. Desde el VAR advirtieron al colegiado de una posible mano de Eric García. La mano era clara y cuando parecía que iba a pitar penalti al Barça le salvó un fuera de juego previo de Lautaro, que invalidó el penalti posterior de Eric. Minutos después, otro fuera de juego evitó el primer gol del Inter. De nuevo a la contra, se escapó Correa y superó en el uno contra uno a Ter Stegen, pero el liniera levantó la bandera y el gol no subió al marcador. Dos sustos casi seguidos que evidenciaron que con muy poquito el Inter le podía hacer daño al Barça.
Entonces surgió la figura de Pedri, que trató de controlar el partido y dirigir el juego azulgrana. El canario protagonizó varias acciones de lujo, pero todas las jugadas del Barça acababan en las botas de Dembélé y el francés no estaba nada inspirado. Se equivocaba en la toma de decisiones y aunque tuvo ocasiones para romper al Inter, no le salía nada.
Y cuando parecía que se llegaría al descanso con empate a cero, nueva contra del Inter, transición rápida con un espectacular cambio de juego de Dimarco y después de un par de rechaces en la frontal el balón le llegó a Çalhnaloglu, que de nuevo sacó el fusil y esta vez superó a Ter Stegen. Disparo durísimo ajustado al poste que se coló en la portería y provocó el delirio en San Siro.
No cambió Xavi nada en vestuarios y los mismos del inicio emprendieron la aventura de intentar hacer trabajar algo a Onana, muy tranquilo hasta entonces. Pero los primeros minutos no atisbaban un cambio. Los italianos, no es que estuvieran cómodos, pero tenían controlado a un Barcelona con posesión, pero sin profundidad. Impresionante trabajo de Dimarco, sobre todo en defensa, para que los de Xavi no crearan peligro. Si ya tenía problemas en defensa por las lesiones el Barcelona, al cuarto de hora de la reanudación se tuvo que retirar Christensen -con problemas en el tobillo- para que entrara Piqué.
El primer aviso claro fue de los azulgranas tras cuajar una buena contra finalizada por Dembélé. El poste evitó el gol. Se le escapaba el ansiado control a Xavi, por lo que movió ficha metiendo a Ansu Fati y a Balde (antes había entrado Piqué por lesión de Christensen). Y precisamente sería el delantero el que privaría al Barça del empate, pues el VAR detectó una desafortunada mano de Fati antes de que el centro lateral colgado por Dembélé llegara a los pies de Pedri y este la embocara en la meta de Onana (67′).
Parecía que los cambios sonreían al Barça porque poco después empataba Pedri, que se encontró con un balón dentro del área. Después de revisarlo en el VAR, el árbitro lo anuló por manos de Ansu Fati. El conjunto azulgrana lo siguió intentando a la desesperada y hasta el final pero como en todo el partido le faltó clarividencia en ataque. Tampoco lo ayudó el VAR, que no vio unas manos bastante claras de Dumfries.
Otra noche aciaga para el Barça en Europa. El encuentro de la semana que viene en el Camp Nou ante el Inter es una auténtica final para que los azulgranas sigan vivos y tengan opciones de pasar a octavos de final.
Fotos: Libertad Digital y La Vanguardia
Twitter: @alexgomezse