El joven defensor de 21 años está siendo clave en el filial franjirrojo, y apunta a seguir creciendo en el filial de un club de Primera División
El Rayo Vallecano siempre ha puesto su foco en la cantera. Para los rayistas, cuidar de sus categorías inferiores es tan importante como cuidar del primer equipo. Pese a que están pasando por muchos problemas en la Ciudad Deportiva, los jugadores que conforman la cantera franjirroja siguen siendo motivo de orgullo para los aficionados del Rayo y Vallecas.
Diego Robles forma parte de esa serie de jugadores que han pasado por la cantera franjirroja, de la que sigue formando parte. Nació en el año 2004, y muy pronto, a los 7 años, en edad benjamín, se incorporó a la cantera del Atlético de Madrid. En las inferiores colchoneras pasó nueve temporadas, hasta cadete, donde coincidió con muchos talentos, como Alejandro Garnacho, y se hizo con varias ligas, alcanzado dos finales en LaLiga Promises, uno de los mejores torneos de cantera del mundo.
Con su salto a juveniles, cambió de equipo en la capital madrileña, y a los 16 años cambió el Atleti por el Rayo. Su estancia en el barrio de Vallecas no pudo empezar de mejor forma, ya que, con el Juvenil C en su primera temporada como franjirrojo, se hizo con el título de campeón de la Primera Autonómica. Para la siguiente campaña, la 2021-22, ascendió al Juvenil B, donde fue un jugador trascendental sumando más de 2.000 minutos.
En su última campaña de juvenil, estuvo enrolado en el primer juvenil franjirrojo, teniendo un ascenso muy escalonado en los diferentes equipos de la franja. Tras su aventura con el Rayo, para su primera campaña como senior, decidió aceptar la oferta del Pozuelo de Alarcón, que disputaba la Tercera RFEF. Pese al descenso del equipo, su gran rendimiento individual ocasionó que el Rayo le recuperara para su filial.
Su vuelta a Vallecas no podía haber sido mejor. En la temporada del centenario del club no solo le fue bien al primer equipo, que se clasificó por segunda vez para Europa, sino que el filial ascendió de Tercera a Segunda RFEF, con Diego Robles siendo pieza fundamental, jugando 37 encuentros como titular, y acumulando más de 3.000 minutos. Esta temporada, su primera en Segunda RFEF, también está siendo muy importante para su entrenador, ya que ha sido titular en los siete encuentros que el filial rayista ha disputado.
Diego Robles es un lateral zurdo de mucho recorrido. De hecho, en esta temporada ya suma dos tantos, pese a partir desde el lado defensivo del costado izquierdo. Su ascenso ha sido muy paulatino, sabiendo escoger destino, y volviendo a la cantera de un equipo de Primera División. Su gran rendimiento podría ocasionar una llamada de Íñigo Pérez con el primer equipo. De momento, el joven lateral seguirá trabajando para poder lograr los objetivos con el filial y seguir creciendo a nivel individual.