El equipo de Diablos Rojos Femenil de softbol encaró este martes su segundo día de entrenamiento en el estadio «Harp Helú» previo a su debut el próximo 23 de enero cuando enfrenten a las Olmecas de Tabasco.
El crecimiento del softbol a nivel nacional, no solamente se destaca por la incursión de nuevos equipos (Naranjeros de Hermosillo y Algodoneros Unión Laguna de Torreón), sino que además, esta temporada 2025 de la LMS será histórica porque a partir de la misma, el «Diamante de Fuego» se convertirá en la nueva casa de «las escarlatas» para sus juegos de local.
Al finalizar la práctica, la head coach Dennise Fuenmayor y las jugadoras Rosi del Castillo y Stefania Aradillas brindaron una serie de entrevistas en donde no solo resaltaron los objetivos trazados, sino que se abordaron las expectativas y el significado personal de la temporada para cada una de ellas:
«El objetivo evidente va a ser el mismo, nosotros queremos llegar a serie final, tenemos esa espinita desde el año pasado y en base a eso y para eso se va a trabajar (…) Estamos bastante enfocados en eso, pensé que sería más difícil adaptar a las jugadoras y no, ha sido bastante fácil. Tenemos un equipo bastante competidor» destacó la venezolana.
En cuanto a la seleccionada mexicana, esta temporada representa una nueva oportunidad para la obtención del campeonato, basándose en el compromiso del staff, del cuerpo técnico, de las jugadoras, pero sobre todo de ella:
«Me preparé física y mentalmente. Desde que terminé la temporada pasada estuve trabajando para llegar mejor y más que nada trabajé en esas pequeñas fallas que tuve la temporada pasada. Tenemos un gran compromiso de la temporada pasada que no se logró el objetivo, pero esta temporada seguimos con el mismo objetivo. Vamos a lograr grandes resultados»
Finalmente, Stefania, con cuentas pendientes después de su lesión, ha vuelto con sed de revancha no solamente a nivel colectivo, sino a nivel individual.
«Emocionada, motivada, porque no acabé de la manera que yo hubiera querido y ahora después de nueve meses de la operación me siento fuerte, me siento cómoda y tengo el respaldo de todas mis compañeras y de mi cuerpo técnico (…) Estoy orgullosa de pertenecer a una organización (Diablos Rojos) con mucha historia, ganadora, con mucho orgullo que simplemente es algo que no se puede describir. Una organización que te trata como familia. Al final del día si esto no se disfruta no vale la pena», agregó.
El equipo escarlata de momento cuenta con 15 de 19 jugadoras del roster, a espera de que las 4 integrantes restantes se incorporen a más tardar la próxima semana.
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