Pablo de Aguinaco Berrio
El Athletic Club sufre una dolorosa derrota en casa ante el Elche, desperdiciando la oportunidad de asegurar su pase a competiciones europeas. La mala fortuna y la falta de contundencia se han vuelto una constante para los leones, quienes ahora se enfrentan a un desafío de dimensiones colosales en la última jornada de LaLiga Santander
El Athletic Club sufre una dolorosa derrota ante el Elche en LaLiga Santander. Los leones se muestran una vez más ineficaces en el área rival, perdiendo una oportunidad clave para asegurar su lugar en competiciones europeas. La falta de puntería y contundencia del equipo ha sido un lastre a lo largo de toda la temporada, y esta derrota refuerza esa preocupante tendencia.
Desde el inicio del partido, el Athletic buscó tomar el control del juego y dominar a un Elche ya descendido que se movía sin presión. Sin embargo, a pesar de tener mayor posesión y generar numerosas oportunidades de gol, los leones no lograron materializar ninguna de ellas. La falta de precisión en el remate se ha convertido en un problema recurrente para el equipo, y este encuentro no fue la excepción.
La afición de San Mamés, que esperaba un partido unidireccional a favor del Athletic, se mostraba impaciente y nerviosa ante la falta de acierto de sus jugadores. Iñaki Williams tuvo una clara oportunidad de abrir el marcador en los primeros minutos, pero su disparo fue despejado por la defensa rival. A medida que el tiempo avanzaba, la frustración crecía tanto en las gradas como en el terreno de juego.
La falta de pegada frente a la portería rival y las decisiones arbitrales discutibles generaron una mezcla de pitos y reclamos por parte de jugadores y afición
El primer tiempo concluyó sin goles, a pesar de los numerosos intentos del Athletic. Once remates a portería tuvo el equipo rojiblanco, pero solo dos de ellos encontraron el camino del gol. La falta de pegada frente a la portería rival y las decisiones arbitrales discutibles generaron una mezcla de pitos y reclamos por parte de jugadores y afición.
En la segunda mitad, el Athletic continuó presionando en busca del gol que les diera la ventaja. Sin embargo, el Elche se defendió de manera ordenada y logró neutralizar los intentos del equipo local. Los minutos avanzaban y la desesperación se apoderaba de los leones, que se volcaron al ataque en busca del ansiado gol.
El guardameta del Elche, Edgar Badía, se convirtió en el protagonista del encuentro al realizar una serie de espectaculares intervenciones para mantener su portería imbatida. En el minuto 71, protagonizó un minuto de gloria al detener los remates consecutivos de Berenguer, Williams y Raúl García. El Athletic se volcaba cada vez más en busca del gol, pero la falta de efectividad les pasó factura una vez más.
Ahora deberán visitar el Estadio Santiago Bernabéu en la última jornada y esperar otros resultados para mantener vivas sus esperanzas de competir en el ámbito continental
Y en el minuto 92, cuando el empate parecía el resultado final, llegó el golpe definitivo para el Athletic. Una mala jugada defensiva permitió al Elche montar un contragolpe letal que culminó en el gol de Lucas Boyé. San Mamés quedó en silencio, y la decepción invadió a jugadores y aficionados por igual.
Esta derrota deja al Athletic en una situación complicada de cara a la lucha por la clasificación europea. Ahora deberán visitar el Estadio Santiago Bernabéu en la última jornada y esperar otros resultados para mantener vivas sus esperanzas de competir en el ámbito continental. El equipo deberá reflexionar sobre sus problemas de puntería y trabajar en mejorar su eficacia en este sentido.
